Cuando digo que las empresas mexicanas carecen de opciones de financiamiento, no estoy encontrando el hilo negro de la economía nacional. Lo sabemos, el sistema bancario además de ser costoso es complicado.
La escasa información en los requisitos y compromisos es la principal razón por lo cual las empresas no consiguen o no les interesa acceder a un crédito. A estas variables, añádanle la demora de autorización, las altas tasas de interés, las comisiones exageradas y la mala calidad en el servicio al cliente.
La situación no sería tan importante si no lo cotejáramos con los resultados arrojados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI): en México existen aproximadamente 4 millones 15 mil empresas, de las cuales 99.8% son PYMES que generan 52% del Producto Interno Bruto (PIB) y 72% del empleo en el país.
Sin embargo, solo dos de cada 10 empresas alcanzan los cinco años de vida. ¿Cuál es el principal problema? La falta de financiamiento.
Ante esta situación, en PitchBull lo teníamos bastante claro: Había que actuar.