La planeación financiera es la ruta que ayuda a determinar los objetivos de corto, mediano y largo plazo de tu negocio.
También permite conocer los recursos (humanos, tecnológicos, operativos y financieros) con los que cuentas o necesitas conseguir para el cumplimiento de tus metas.
Antes de comenzar a hacer tu plan financiero, es necesario crear una planeación estratégica.
¿Qué es la planeación estratégica?
Según el portal de Economipedia, la planeación estratégica es la herramienta utilizada por las empresas como un proceso sistemático que permite el desarrollo y la implementación de proyectos para alcanzar los objetivos, además de permitir formular, implementar y evaluar las decisiones empresariales.
En resumen, una estrategia puede ayudarte a establecer lo que realmente es importante y genera valor para tu organización.
Concentrándose en temas financieros, nos debemos preguntar, ¿qué es la planeación financiera y para qué sirve?
Un plan financiero anual es una especie de guía que te indica cómo se encuentra tu situación financiera, cuáles son tus metas y qué áreas o problemas deben abordarse para que puedas alcanzar tus objetivos empresariales.
Uno de los objetivos de la planeación financiera es garantizar que tengas el control total de tus finanzas, ingresos y responsabilidades para tener mejores posibilidades en el mercado.
Se recomienda hacer un plan con proyecciones mínimas a 12 meses, donde se considere el pasado, el presente y las perspectivas futuras, para poder prever la cantidad de dinero que necesitas ahorrar o conseguir para seguir operando.
Objetivo de la planeación
La razón principal es crear una hoja de ruta hacia los objetivos de tu negocio, lo que define un mejor manejo de los recursos, para sacar mayor provecho a los retos y oportunidades a las que te enfrentes en tu PyME.
Consejos prácticos en el desarrollo de la Planeación Financiera:
- Sé realista. Establece objetivos y metas claras.
- Conoce tu situación financiera. Haz una lista de tus ingresos y egresos, haz una resta del total de gastos al total de entradas.
- Analiza. A partir de la información anterior, puede deducir si estás teniendo gastos innecesarios, pérdidas o cuentas con un presupuesto no comprometido para nuevos proyectos o es momento de pedir un préstamo.
- Establece objetivos.Después de realizar el análisis, es momento de tomar acciones para mejorar o superar los indicadores.
Primero tienes que hacer tus objetivos generales, estos te van a servir de guía para hacer objetivos específicos. Algunos ejemplos: Aumentar tus ingresos o disminuir tus deudas o ahorrar más dinero.
Segundo, con base a tus objetivos generales, tienes que establecer tus objetivos específicos, estos te ayudarán a medir tu progreso para alcanzar tu Objetivo General, algunos ejemplos: Reducir tus gastos mensuales en un 30% para el próximo mes o buscar más clientes para aumentar las ventas en un 10% este año.
5.Diseña tu plan de acción. Este paso se refiere al camino de cómo alcanzarás tus objetivos, por ejemplo: Si estableciste aumentar las ventas en 10% este año, tal vez debas contratar 1 vendedor más o invertir en publicidad digital.
6. Elabora un presupuesto. Compartimos algunos puntos del blog de Finanzarel de cómo elaborar un presupuesto financiero eficaz:
El primer paso siempre es calcular el presupuesto operativo, que es donde se describen las actividades que generan ingresos a la empresa. Gracias a él la compañía podrá prever otros factores como las ventas o los gastos de producción.
Una vez establecido este, la empresa debe tener en cuenta una serie de elementos que le permitirán calcular de forma correcta su presupuesto financiero:Pronóstico de ingresos. Para su elaboración es preciso mirar atrás y revisar el histórico de ganancias que ha tenido la empresa.
–Pronóstico de gastos. Es de vital importancia que la empresa calcule lo que necesita gastar para que esta desarrolle su actividad con normalidad.
–El presupuesto de cada uno de los departamentos de la empresa. Cada área debe especificar sus gastos específicos en infraestructuras, producción, personal, etc.
–Las revisiones. De nada sirve realizar un presupuesto anual si este no cumple con los objetivos previstos.
–Gastos eventuales. Es decir, aquellos gastos con los que la empresa no contaba previamente. Es importante destinar una partida para ellos dentro del presupuesto anual de la compañía.
–Análisis de créditos costosos. No todas las deudas son malas, al contrario, algunas pueden ayudar a impulsar el crecimiento de las empresas, sugerimos revisar las condiciones de los préstamos adquiridos y de ser posible, cambies a uno que se adapte mejor a tus necesidades.
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